Pieza estrenada en el Festival Grec 2005. La obra es una invitación al espectador a presenciar distintos momentos de la convivencia amorosa de una pareja de hombres: la atracción inicial, la pasión, las secretas fantasías, la mutua identificación, los desencantos.Sigue siendo una de las pocas piezas de danza sobre este tema en España.

Su primera presentación en la sala La Fundición de Bilbao despertó gran expectación en el público vizcaíno .
La obra fue interpretada por un dúo de magníficos bailarines, Nicolaas Marckmann y Glaub da Silva, quienes potenciaron la coreografía de García con su efectividad profesional y la conexión que logran. El atractivo de la pieza proviene del equilibrio con el que García combinaba la danza con los arreglos escenográficos del artista José Menchero y las creaciones multimedia del diseñador australiano Lawrence Wallen, bajo una banda sonora ecléctica que iba desde composiciones del s. XIX hasta Björk. “He puesto a los bailarines a buscar en sus experiencias de pareja, sus emociones, su sexualidad y sus relaciones sociales para llegar a la confluencia entre la coreografía y la vivencia personal”, dijo García, explicando su proceso de creación.

Siguiendo la línea de sus creaciones del 2004 (“Orfeo Concert” y el espectáculo multimedia “La Mirada del Otro”) que mostraban el encuentro intercultural, el trasfondo de esta obra tenía que ver con ayudar a disminuir los trazos todavía presentes del pensamiento reaccionario en nuestra sociedad.

Presented in Grek Festival 2005, Cosa de Hombres showed the relationship between two gay men from a very intimate point of view, combining tenderness, drama, erotism, the pleasure of dancing, the passion for life and a touch of humor. Through the combination of dancing, beautiful video projections and music, the spectator could feel different moments in the relationship: The first encounter, the attraction, the doubts, the secret fantasies and disenchantments of the couple.
The register explored by García in this piece was the medium composition where the symphonic movement was synthesized in a duet. “I have asked the dancers to explore his love and sexual experiences, their emotions and their anima to promote an identification with choreography“, said the director.