DANZA Y SALUD: NUESTRO CUERPO, NUESTRA RESPONSABILIDAD.Por: Melva Icaza Villalaz

[Melva Icaza Villalaz]

Nuevas formas de mejorar las cualidades físicas complementan la actividad diaria de los bailarines-intérpretes de la danza, algunos métodos en los cuales se desarrolla el fortalecimiento muscular, la flexibilidad y la relajación  apoyan la técnica de danza.

El cuerpo es la herramienta utilizada por los bailarines-intérpretes de la danza para expresarse y comunicarse, quienes experimentan constantemente  movimientos repetitivos, largas sesiones de ensayos, estrés y problemas derivados del cansancio psíquico, aspectos estos que se manifiestan en síntomas o pequeños problemas que de no ser prevenidos o resueltos adecuadamente, pueden terminar con la vida artística del profesional de la danza, por lo que es de vital importancia el saber cómo cuidar y mantener sano su cuerpo  mediante un “sistema de bienestar corporal” que le permita llevar una vida saludable, adoptar  hábitos para el manejo de los  problemas de estrés, y que además le provea conocimientos para apoyarle en la recuperación de  su  habilidad física, de manera que sea más segura, permitiéndole así el  mejor aprovechamiento  de la danza de su preferencia.

Cada género de danza implica diferentes grados de dificultad y con ellos va la demanda de energía y fortaleza en la realización de los pasos, lo que implica una mayor demanda de proteínas, vitaminas y demás nutrientes necesarios para dicho esfuerzo físico, por lo que  los bailarines-intérpretes de la danza requieren una “dieta acorde a esfuerzo físico”.

La hidratación al igual que la alimentación es imprescindible, cuidando de tomar agua al tiempo y no agua fría, ya que la temperatura del cuerpo es de 37ºC y al ingerir el agua helada le estamos provocando al cuerpo un desequilibrio en la temperatura interna, lo que trae consigo una digestión lenta, pesadez y decaimiento físico.  Es importante recordar beber agua entre los períodos de las comidas y  no durante la comida.

Incorporar hábitos de relajación en nuestras rutinas diarias nos brinda un beneficio de gran valor, ya sea que tomemos unos pocos minutos para meditar escuchando música instrumental, una sesión de masaje relajante, de acupresión, utilizando la aromaterapia, o una inmersión en un baño de  esencias, nos permite renovarnos y armonizar nuestro cuerpo.  Las técnicas de  visualización y programación “Descanso Constructivo”  también contribuyen grandemente en este proceso de relajación corporal, permiten ir relajando progresivamente el cuerpo de pies a cabeza, a la vez que se  utilizan imágenes que resultan en una sensación de reposo y tranquilidad.

La lectura, la diversión o los entretenimientos proveen ese canal para descansar la mente, nos hace enfocarnos en temas diversos y este cambio da nuevas perspectivas al retomar nuestro trabajo.

Sonría!  Libérese del estrés!  Ame su cuerpo!  Le propongo mi lema que  dice “Sonreir sana el cuerpo y amar enriquece el espíritu”

Recuerde nuestro cuerpo, es nuestra responsabilidad!